Cómo cuidar la piel en invierno en ¡Sólo 4 pasos!
Los meses fríos ponen a dura prueba nuestra piel que se seca, irita y pierde de tono. No hay modo de evitar los efectos atmosférico pero si que hay productos y acciones que nos pueden ayudar. Y tu, ¿Sabes como cuidar de la piel en invierno?
Mascarillas hidratante, aceites para la piel y cremas ricas en nutrientes, hay toda una serie de rituales de belleza diarios para proporcionar a nuestra piel la justa protección para enfrentarse al invierno ¡Continua a leer para descubrir todos los pasos para mimar tu piel en los meses más fríos!
1. Limpieza facial suave: el primer paso hacia una piel saludable
Entre los pasos más importante para cuidar de nuestra piel con la llegada del frio está seguramente la elección de productos suaves para la limpieza facial.
Muchos geles faciales o productos para piel grasa y con imperfecciones contienen agente levantes muy agresivo (SLS y SLES). En apariencia, al principio la piel aparece limpia y purificada. A largo plazo, estamos quitando a la piel su hidratación natural, creando una situación de desequilibrio que puede empeorar aun más los problemas que intentamos tratar. Y así intentamos compensar con productos de farmacia, tratamientos intensivos, sesiones de limpiezas profesionales agresivas y caras… con el resultado de llenar nuestra piel de tóxicos innecesarios y vaciar nuestra cartera.
La mejor rutina facial, tanto en invierno como en verano, es muy minimalista: un jabón facial y un tónico a base de agua de rosa, apto para cualquier tipo de piel.
Según tu tipo de piel, podrás elegir un jabón u otro. Nosotros producimos jabones faciales a base de aceite de oliva y coco aptos para cualquier tipo de piel:
- Jabón de rosa mosqueta y manzanilla, para piel sensible
- Jabón de arcilla y laurel, para piel grasa
- Jabón de karité y canela, para piel seca
- Jabón de avena y miel, para piel mixta
¿El truco? Sea cual sea tu tipo de piel, combina el jabón especifico para tu piel con el de leche e canela, ideal para cuidar la piel en invierno ¡Tu piel te lo agradecerá!
2. No olvidarte de los exfoliantes
Cuando la piel está muy seca, creemos que lo último que deberíamos hacer es utilizar un exfoliante. En realidad, una exfoliación suave permite remover la células muertas y favorecer la regeneración de nuevas. Eso si, que no contengan microplásticos.
Cómo exfoliar correctamente en invierno:
- Usa exfoliantes suaves, preferiblemente naturales.
- Limita la exfoliación a 1-2 veces por semana.
- Evita productos con microplásticos, optando por alternativas ecológicas.
- Aplica movimientos circulares suaves, sin frotar excesivamente.
- Enjuaga con agua tibia, nunca caliente.
3. Mima tu piel en invierno con mascarillas hidratantes
Las mascarillas faciales aportan un cuidado extra y, especialmente en esta temporada, son fundamentales. Las purificantes (a base de arcilla verde, carbón vegetal,…) es mejor hacerlas como mucho una vez por semana. Las mascarillas hidratantes si que se pueden usar sin limitaciones, almeno un par de veces a la semana. Sirven para mantener la piel de rostro bien nutrida e hidratada
No hace falta ir en perfumería, hay muchas mascarillas que se pueden realizar en casa con ingredientes que seguro están en todas las despensas.
Mascarillas caseras para hidratar tu piel:
- Aguacate y miel: Mezcla medio aguacate maduro con una cucharada de miel. Aplica durante 15 minutos.
- Yogur y avena: Combina 2 cucharadas de yogur natural con 1 de avena molida. Deja actuar por 20 minutos.
- Pepino y aloe vera: Licúa medio pepino con 2 cucharadas de gel de aloe vera. Aplica por 10 minutos.
Estas mascarillas caseras proporcionan hidratación intensa y nutrientes esenciales para combatir la sequedad invernal.
4. La importancia de una buena hidratante
Finalmente llegamos a las cremas. Sobra decir que nunca deberías salir de casa sin crema hidratante. Hidratar la piel al máximo, con formulas ricas, es el paso clave para mantener la piel sana en invierno.
Consejos para elegir la crema perfecta:
- Para el día: Opta por cremas ligeras que se absorban rápidamente.
- Para la noche: Elige fórmulas más ricas y nutritivas.
- Pieles muy secas: Usa cremas densas tanto de día como de noche.
Dos opciones de Ajedrea Cosmética destacadas son:
- Crema facial de argán: Con propiedades antioxidantes y antiarrugas, ideal para pieles secas.
- Crema de rosa mosqueta: Aporta elasticidad y suavidad, adecuada para todo tipo de piel1.
Ambas contienen agua de hamamelis, conocida por sus propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias e hidratantes.
No le tengas miedo a los aceites
Son muchas las personas que le tienen miedo a los aceites para cuidar la cara. Es verdad que no todas las pieles toleran bien los aceites, pero esto resultan beneficiosos para la mayoría. Un par de veces por la semana, un par de gotas de (aceite puro pueden sustituir tu crema hidratante (si tienes la piel muy seca puede mezclar el aceite a la crema). Por ello los aceites faciales son excelentes aliados en invierno, aunque muchos los temen. La clave está en saber usarlos correctamente.
Cómo incorporar aceites en tu rutina:
- Aplica unas gotas de aceite puro 2-3 veces por semana.
- Para pieles muy secas, mezcla unas gotas de aceite con tu crema habitual.
- Elige aceites adecuados para tu tipo de piel: jojoba para piel grasa, argán para piel seca, rosa mosqueta para piel madura.
Los labios, eternos olvidados
Igual que por la crema hidratante, si quieres evitar (labios secos y agrietados) asegúrate siempre de no salir de casa sin (un buen protector labial )
Los labios son especialmente vulnerables en invierno. Para evitar labios secos y agrietados:
- Usa un bálsamo labial con ingredientes naturales como cera de abeja, manteca de karité o aceite de coco.
- Exfolia suavemente los labios una vez por semana con una mezcla de azúcar y miel.
- Mantente hidratado bebiendo suficiente agua.
- Evita lamer los labios, ya que esto aumenta la sequedad1.
🟢 Consejos adicionales para un cuidado integral
Para complementar tu rutina de cuidado facial en invierno:
- Protección solar: Aunque haya menos sol, los rayos UV siguen presentes. Usa protector solar diariamente.
- Humidificador: Mantén un humidificador en tu habitación para contrarrestar el aire seco de la calefacción.
- Dieta balanceada: Consume alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 y antioxidantes para nutrir tu piel desde el interior.
- Hidratación interna: Bebe suficiente agua, incluso si no sientes sed.
- Evita duchas muy calientes: El agua muy caliente elimina los aceites naturales de la piel.
- Viste en capas: Protege tu piel del frío con ropa adecuada, evitando la transpiración excesiva.
La importancia de la constancia
El cuidado de la piel en invierno no se trata solo de productos, sino de constancia. Establece una rutina diaria y semanal, y mantente fiel a ella. Los resultados no serán inmediatos, pero con el tiempo notarás una mejora significativa en la salud y apariencia de tu piel. Recuerda que cada piel es única, así que es posible que necesites ajustar estos consejos a tus necesidades específicas. No dudes en consultar con un dermatólogo si tienes dudas o si tu piel presenta problemas persistentes. Con estos pasos y consejos, podrás enfrentar el invierno con una piel saludable, hidratada y radiante. ¡Tu piel te lo agradecerá cuando llegue la primavera!
Con todos estos gestos diarios, ¡tu piel no le tendrás más miedo al invierno!
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